Tirso Abantos es un exmilitar solitario y poco afectuoso que regenta una ferretería de barrio. Tras un incidente familiar se ve obligado a encargarse durante un tiempo de su nieta Irene, una joven rebelde que anda con malas compañías.
Ahora que Tirso sabe que Romero ha vuelto al barrio y que es el asesino de pandilleros, no cejará en su empeño de encontrarlo y acabar con él. Lo que no espera es que Ezequiel descubra que Tirso estaba allí cuando asesinaron a Quini y su secuaz. El policía sospecha inmediatamente que el ferretero puede ser el asesino de pandilleros y empieza a investigarlo con la ayuda de Camila.