Charlie Harper un soltero que tiene todo lo que un hombre necesita: Dinero, un jaguar en el garaje y mujeres. Su informal estilo de vida en Malibú, es interrupida drásticamente con la llegada de su hermano Alan quien está muy deprimido tras afrontar un divorcio, y de su hijo de 10 años, Jake, que se mudan para quedarse a vivir con él. De este modo, juntos inician un camino en el que deben afrontar los retos e ir madurando poco a poco.
Mia regresa a la ciudad con su grupo de baile e invita a Charlie a su actuación. En un primer momento, él decide no ir y trata de convencer a Alan que él no siente más nada por ella. Charlie va a ver la actuación y Mia explica que quiere el esperma de Charlie. Charlie le responde preguntándole para casarse con él.