En 1992, Amy Fisher, una adolescente de los suburbios de Nueva York, capturó la atención de los medios nacionales al dispararle en la cara a la esposa de su amante. Esta sórdida historia de sexo con menores, agresión con agravantes y Joey Buttafuoco dio lugar no a una, ni a dos, sino a tres películas para televisión. Drew Barrymore, Alyssa Milano y Noëlle Parker intentaron interpretar a la perturbada joven, pero nunca se había visto una verdadera representación de Amy Fisher en la pantalla, hasta ahora. En este Rashomon del metraje encontrado, el director Dan Kapelovitz fusiona los múltiples melodramas en una mezcla definitiva de metadrama.