**Sí, el amor embriaga**
La extrema delgadez del hilo argumental en _Licorice Pizza_ hace casi imposible determinar su verdadera trama. Apenas existe una historia tangible, se trata más bien de un montón de pequeñas crónicas en las que un grupo de quinceañeros hacen lo posible para madurar de forma abrupta mientras uno de ellos cruza sus tribulaciones con la chica de sus sueños, una veinteañera de carácter incompleto que todavía busca su sitio en este mundo, de la que se enamora, con la que inicia una amistad platónica y desea un romance imposible.
La ternura, los celos y el deseo se hacen latentes en todas las tramas, y es en realidad Paul Thomas Anderson quien las sublima con esas texturas marca de la casa y una banda sonora imprescindible. _Licorice Pizza_ no está a la altura de los mejores trabajos de Anderson (_Boogie Nights, Pozos de Ambición, Embriagado de Amor_…), pero es una obra de ágil narración para deleitarse con las aventuras y desventuras de dos muchachos escarbando en sus sentimientos.