30 Minutos Para Morir (2016)

El comandante Bill Cage es un oficial que nunca ha visto un día de combate cuando lo degradan sin ceremonias y lo dejan caer en combate. Cage es asesinado en cuestión de minutos, logrando llevarse un alienígena alfa con él. Él se despierta al comienzo del mismo día y se ve obligado a luchar y morir de nuevo ... y de nuevo, ya que el contacto físico con el alienígena lo ha lanzado a un ciclo de tiempo.

Cris Johnson es un mago de Las Vegas bendecido con un don que también es una maldición: cuenta con la sobrenatural capacidad de saber qué va a ocurrir a continuación. Johnson puede ver el futuro unos cuantos minutos más allá del momento presente, un talento extrasensorial que, sin duda, le viene muy bien para su trabajo como mago y mentalista en un sórdido club de Las Vegas donde actúa cada noche. Por otra parte, la agente antiterrorista Callie Ferris, quiere sacar partido al talento de Johnson con objeto de impedir el ataque que unos terroristas planean ejecutar contra Los Angeles mediante un arma de destrucción masiva. La cuenta atrás de la bomba prosigue y Johnson sería un elemento clave a la hora de impedir un holocausto nuclear. Si no recurre a sus poderes para canalizar su visión a través de los portales temporales correctos para así poder modificar el presente, su futuro – y el de cientos de miles de personas – podría ser una cosa del pasado…

Roy es un antiguo miembro de las fuerzas especiales de Estados Unidos, ahora retirado. Aunque este espera disfrutar de una vida tranquila, la tarea no será tan sencilla. Roy comienza a vivir, una y otra vez, el día de su muerte, y deberá averiguar quién es el responsable definitivo para evitar que el momento de su fallecimiento resulte eterno.

Dos amantes disponen tan sólo de unos minutos para cambiar el curso de sus vidas. Lola recibe una llamada desesperada de su novio Manni, que acaba de perder una pequeña fortuna que pertenece a un jefe de la mafia para el que trabaja. Si Lola no consigue el dinero en veinte minutos, Manni sufrirá las consecuencias.

Un miércoles cualquiera, a los residentes de un centro de rehabilitación juvenil se les concede un pase de un día para salir de nuevo al mundo y hacer las paces con aquellos a los que les han hecho mal. Tres de ellos se encontrarán en un laberinto temporal imposible, viviendo cada día los mismos acontecimientos una y otra vez, una situación a la que cada uno responde de manera radicalmente diferente.