En Gran Bretaña, Reino Unido se recuperan de la desesperación de la Gran Guerra, las personas sobreviven a como pueden, y las bandas criminales proliferan en una nación sacudida económicamente.
Es justamente aquí donde una familia de gánsteres irlandeses de origen nómada (a veces llamados gitanos o chatarreros) asentada en Birmingham (los Peaky Blinders) justo después de la Primera Guerra Mundial, dirigen un local de apuestas hípicas en la ciudad. Las acciones del ambicioso, respetado, temerario y peligroso jefe de la banda, Thomas Shelby, llaman la atención del Inspector jefe Chester Campbell, un detective de la Real Policía Irlandesa que es enviado por el mismo Winston Churchill desde Belfast donde había sido enviado a limpiar la ciudad del Ejército Republicano Irlandés (IRA), comunistas, pandillas y delincuentes comunes.
Thomas arregla una carrera de caballos para provocar a un capo local y comienza una guerra con una familia gitana. El inspector Campbell lleva a cabo una redada.
Thomas planea acercarse a Billy Kimber en las carreras de Cheltenham y considera aceptar una oferta de simpatizantes del IRA que quieren comprarle las armas robadas.
Mientras se intensifica la guerra con la familia Lee, Thomas sospecha de la prometida de su hermano. Campbell presiona a la pandilla para que entreguen las armas.
Thomas se prepara para expulsar a Billy Kimber del poder, pero los secretos familiares y la persecución sin tregua de Campbell podrían llevarlo a la ruina.