En Gran Bretaña, Reino Unido se recuperan de la desesperación de la Gran Guerra, las personas sobreviven a como pueden, y las bandas criminales proliferan en una nación sacudida económicamente.
Es justamente aquí donde una familia de gánsteres irlandeses de origen nómada (a veces llamados gitanos o chatarreros) asentada en Birmingham (los Peaky Blinders) justo después de la Primera Guerra Mundial, dirigen un local de apuestas hípicas en la ciudad. Las acciones del ambicioso, respetado, temerario y peligroso jefe de la banda, Thomas Shelby, llaman la atención del Inspector jefe Chester Campbell, un detective de la Real Policía Irlandesa que es enviado por el mismo Winston Churchill desde Belfast donde había sido enviado a limpiar la ciudad del Ejército Republicano Irlandés (IRA), comunistas, pandillas y delincuentes comunes.
Tommy pone rumbo a Norteamérica, donde el final de la prohibición trae nuevas oportunidades. Sin embargo, se enfrenta al peligro de la mano de un antiguo adversario que finalmente a decidido jugar sus cartas.
Tommy se involucra en un juego de poder con fascistas, luchadores por la libertad y mafiosos de Boston. Mientras los jugadores planean traicionarlo, Tommy visita a un viejo aliado en Camden.
Enfrentado a noticias devastadoras, Tommy emprende una búsqueda para descubrir quién fue el que lanzó una maldición sobre su familia. En Birmingham, Ada se hace cargo y Arthur contrata a nuevos reclutas.
Tommy establece una conexión entre el crimen y el poder político que podría alterar el curso de la historia. También recibe noticias que le cambian la vida de una fuente inesperada.
A la luz de extraordinarias revelaciones personales, Tommy toma un curso de acción que lo cambiará todo. Mientras tanto, los planes de sus enemigos empiezan a encajar.