Baywatch: Guardianes de la bahía (2017)

Campy, cheesy and slow-mo heavy, Baywatch hits the big screen with a new cast and a different feel. The Hoff's chest hair is replaced by Dwayne Johnson's mountainous muscles and Michael Newman's mustache is replaced by Zac Efron's impossibly toned physique. Pammy may not be around, but the Baywatch babes remain. The ridiculousness of the TV series is still present, just ramped up a bit more. The TV series had the Baywatch crew getting into situations far beyond their control, but always saving the day, and the movie doesn't deviate from this track - there's illegal drug trafficking on the beaches and waters of Emerald Bay, Florida and the protectors of the Bay are on it. The acting is fine and captures the cheese and sleaze required. The CGI is laughably bad throughout, especially during the flaming boat scene, and the use of green screen sticks out like a sore thumb. The plot becomes over-the-top as the lifeguards are constantly three steps ahead of the police in their investigations and manage to get themselves into any situation they require, but without each member having a certain set of skills then we'd have no movie. The action scenes are a bit of a mess, but they're still good popcorn-shovelling entertainment.
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Campy, cursi y pesado en cámara lenta, Baywatch llega a la pantalla grande con un nuevo elenco y una sensación diferente. El vello del pecho de Hoff es reemplazado por los músculos montañosos de Dwayne Johnson y el bigote de Michael Newman es reemplazado por el físico increíblemente tonificado de Zac Efron. Puede que Pammy no esté presente, pero las chicas de Baywatch permanecen. La ridiculez de la serie de televisión sigue presente, solo que aumentó un poco más. La serie de televisión hizo que el equipo de Baywatch se metiera en situaciones mucho más allá de su control, pero siempre salvando el día, y la película no se desvía de esta pista: hay tráfico ilegal de drogas en las playas y aguas de Emerald Bay, Florida y los protectores de la bahía están en él. La actuación está bien y captura el queso y la sordidez requerida. El CGI es ridículamente malo en todo momento, especialmente durante la escena del barco en llamas, y el uso de la pantalla verde sobresale como un pulgar dolorido. La trama se vuelve exagerada ya que los socorristas están constantemente tres pasos por delante de la policía en sus investigaciones y logran meterse en cualquier situación que requieran, pero sin que cada miembro tenga un cierto conjunto de habilidades, no tendríamos película. . Las escenas de acción son un poco desordenadas, pero siguen siendo un buen entretenimiento para jugar palomitas de maíz.